27-07-2009 | C's

C's siempre ha propuesto la necesidad de llevar a cabo una política de prevención y lucha contra los incendios a partir de una correcta gestión de los bosques, y de los recursos humanos y materiales.

Hace exactamente diez días, en el artículo de opinión “Cuestión de prioridades” hablaba sobre los problemas que puede acarrear el recorte de efectivos en la prevención y lucha contra los incendios este verano en Cataluña. En dicho artículo, terminé diciendo que la semana que viene hablaríamos intuyendo la situación de incendios que podíamos tener y que desgraciadamente hemos tenido.

Algunos de ustedes pensarán que ha sido pura casualidad, pero para los que nos dedicamos a seguir de cerca la evolución de nuestro clima y de nuestro entorno resultaba fácil saber la situación que nos esperaba; una ola de calor de primera categoría que acompañada de vientos secos podría hacer estragos en nuestros montes.

El balance, miles de hectáreas arrasadas y seis muertos, cinco de ellos en el incendio de Horta de Sant Joan (Tarragona), que se tienen que sumar a los dos ocupantes del helicóptero contra incendios que se estrelló cuando colaboraba en la extinción de un incendio en les Franqueses del Vallès (Barcelona) y del anciano que se vio sorprendido por el fuego en Cabanabona. En total, nueve muertes en lo que llevamos de verano.

A pesar de la cruda realidad, los incendios son un elemento natural y común de los climas mediterráneos y por tanto, es normal su presencia en buena parte de España. Cada verano recibimos noticias sobre grandes incendios en la cuenca Mediterránea (Grecia, Italia…), en Australia, en California, en Sudáfrica. Un elemento natural presente año tras año en diferentes lugares del mundo, cuyo elemento común es su clima mediterráneo, es decir, la época más seca del año coincide con la más cálida. Pero el problema actual de los incendios lo encontramos cuando estos se convierten en grandes incendios pasando de ser un elemento natural a un desastre ecológico. El origen principal de este problema es la falta de una correcta gestión de nuestros bosques. Con el abandono del sector primario debido a su poca rentabilidad económica, los bosques han ido ganando terreno y densidad, creciendo a falta de unas políticas efectivas de mantenimiento y gestión de los bosques. La prevención y la lucha contra los incendios se hacen a lo largo de todo el año.

Por ello, Ciudadanos en sus diferentes programas electorales siempre ha propuesto la necesidad de llevar a cabo una política de prevención y lucha contra los incendios a partir de una correcta gestión de los bosques, dotando de más recursos humanos y materiales a los efectivos que se juegan la vida entre las llamas. Desgraciadamente, las reclamaciones de Ciudadanos en su programa electoral ha quedado demostradas que son necesarias. Ahora solo cabe esperar que se desarrolle una correcta y justa política de gestión forestal a lo largo de todo el año y en vez de recortar en efectivos para la prevención y la lucha contra los incendios se amplíen tanto en número como en equipamiento, mostrando especial interés hacia aquellos héroes, como los miembros de los Grupos de Actuación Forestal (GRAF) que se juegan sus vidas para preservar nuestros bosques y bienes personales. No hay que olvidar nunca que el fuego, también se lleva vidas humanas.

Fran Hervías
Portavoz y Secretario Acción Política C’s-Girona, y miembro del Comité Ejecutivo de C’s