05-08-2015 | C's

La presidenta del grupo municipal de Ciudadanos reclama que el ayuntamiento 'haga cumplir la ley y fomente la complicidad y el respeto entre vecinos y turistas'

Barcelona, miércoles 5 de agosto de 2015. La presidenta del grupo municipal de Ciudadanos (C 's) en el Ayuntamiento de Barcelona, Carina Mejías, ha asegurado que las medidas anunciadas por el equipo de gobierno para regular los pisos turísticos en Ciutat Vella "son impositivas y están basadas en la desconfianza". 

En una comparecencia ante los medios, Mejías ha criticado que "el gobierno de Barcelona en Común obligue a los ciudadanos a desarrollar una labor social que corresponde al ayuntamiento" y que el gobierno de Colau "pretenda crear un parque de vivienda sociales chantajeando los propietarios de los pisos turísticos ilegales a cambio de la condonación de las sanciones por no cumplir la ley ". "Barcelona en Común es heredera de gobiernos progresistas que no han generado un parque de viviendas sociales como se ha hecho en otras ciudades de Europa", ha dicho Mejías que también ha lamentado que "traslade a los barceloneses responsabilidades que corresponden a la administración".

 

Para Mejías el turismo en Barcelona necesita "ordenación y no sanción" y ha reclamado al gobierno municipal que "haga cumplir la ley" y que fomente "la complicidad y el respeto entre los barceloneses y los turistas".Mejías ha recordado que "el sector genera el 14% del PIB de la ciudad".

 

La presidenta del grupo municipal de Ciudadanos ha criticado también que el ayuntamiento pretenda que los turistas "delaten a los propietarios de los pisos ilegales" y ha ironizado asegurando que "sólo les falta ofrecer recompensa". "Se trata de medidas propias de países totalitarios" ha sentenciado Mejías.

 

 La líder de Ciudadanos en Barcelona ha criticado que el gobierno de Colau base sus acciones en " la delación y la imposición" y que esto pone de manifiesto " la incapacidad del equipo de gobierno de controlar y hacer cumplir las normas". Mejías ha propuesto " incrementar las inspecciones, hacer cumplir las sanciones, medidas que fomenten la convivencia y el comportamiento cívico, o incrementar los agentes cívicos y más presencia de la Guardia Urbana para garantizar la convivencia".

 

Carina Mejías ha concluido asegurando que el gobierno de la ciudad de Barcelona se basa " en la improvisación y la rectificación constante " y ha añadido que esto " perjudica la imagen de la ciudad y tiene malas consecuencias como la pérdida de inversiones o de generación de actividad económica".